lunes, 7 de julio de 2008

CHAPLIN. LA SONRISA DEL VAGABUNDO

Escribir sobre Chaplin es, al mismo tiempo, un reto y un placer. Un reto porque especialistas reputados, como David Robinson o Manuel Villegas López, han legado páginas de singular valor, plenas de conocimiento y perspicacia. Un placer asimismo, porque la obra de Chaplin es como un manantial que no se cegara jamás: siempre cabe añadir algo nuevo o, cuanto menos, siempre resulta pertinente y aconsejable rememorar un caudal de tamaña enjundia.
Y hoy, si cabe, más que nunca. No pasa el cine por su mejor momento. Y no hago referencia a la rampante crisis de las salas comerciales, con su liturgia hermosa en franco retroceso, sino a la decadencia creativa que nos asola, y que tres o cuatro nombres escogidos no pueden soslayar.
El ejemplo de Chaplin es un magnífico antídoto contra esa carencia de objetivos artísticos, contra tanta mediocridad como hoy se manufactura envuelta en papel de celofán.
Es un libro honesto y humilde, escrito desde la admiración pero también desde el rigor; por momentos muy sentido, y hasta autobiográfico. Es lo que caracteriza a los clásicos: su obra nos moldea en mayor o menor medida, prefigura nuestros gustos y pasiones. Velázquez, Shakespeare, Mozart... Chaplin.
Cabe decir: ¡qué modernos son los clásicos!

9 comentarios:

Clarice Baricco dijo...

Hola Javier:

Me agrada que estès en la lucha de rescatar lo que vale y que a veces no se valora. Necesario recordar y compartir a los grandes, como Chaplin.

Fìjate que por veinte años, la puerta del baño, estaba pegado un cartel de Chaplin. Nadie de los que llegaban a casa, se salvaba de verlo. Me gustaba mucho. (Ahora hay una puerta nueva).
En casa tengo un libro dedicado a èl escrito por Wolfram Tichy.
Pero sabes? me encantarà tener y leer tu libro. Espero conseguirlo de la manera màs pronta. Lo quiero.

Recibe un abrazo entre la lluvia.

Graciela.

Anónimo dijo...

Javier, ¿tu libro está editado por Almuzara? Estuve trasteando en el blog pero no lo localicé. Me gustaría conseguirlo. ¡¡Dame datos, please!!
Un abrazote

JAVIER ORTEGA dijo...

El libro ha sido editado por Berenice. No es difícil de encontrar en "los establecimientos del ramo", pero en cualquier caso os dejo aquí la dirección de su página web, donde encontraréis otros títulos francamente interesantes:

www.editorialberenice.com

Graciela y Anro, mil gracias por vuestro afecto, el mismo que yo os dispenso. Ojalá que os guste.

Anónimo dijo...

Javier, he leído tu libro y sigo asombrada. La sencillez con la que describes al gran cineasta es la que él llevaba en su corazón. Gracias por arroparme cada noche al son de la dulce melodía de candilejas.

Un abrazo,
Tatiana (Argentina)

Dr Jones dijo...

Pronto leeré este libro sobre el genio Chaplin. Yo creo que crisis artística siempre habrá. Eso de que cualquier tiempo pasado fue mejor es muy aplicable para todos. Cuantos más años atrás más bueno. Yo que crecí viendo cine de evasión ochentero, me parece insuperable. Y un chaval de ahora dentro de unos años le parecerá insuperable el que ve en esta década comparadolo con el que viene. Creo que todas las épocas cinematográficas tienen calidad artística y el análisis de la actual se debe hacer cuando hayan pasado muchos años. Seguro que también encontraremos grandes títulos. No me hagas mucho caso, debe ser que mi amor al cine me ciega tanto todo lo que veo me guta. Encantado de volver a leerte y hasta otra, Javier.

Dr Jones dijo...

Lo siento, quise decir que todo lo que veo me gusta. Lo dicho, encantado de volverte a leer. Hasta otra vez

JAVIER ORTEGA dijo...

Estimado Dr. Jones:
Estoy sustancialmente de acuerdo en cuanto dices respecto a esa tendencia que tenemos a contemplar el pasado artístico como un vergel y el momento presente como un erial. De hecho, sabes bien que precisamente en mi libro dedicado a Spielberg, me explayo sobre dicha cuestión.
Ahora bien, con todo y con eso creo que la última década no ha sido tan pródiga en grandes películas como lo fueron las anteriores. Por supuesto, este juicio tendrá que ser revisado pasado un tiempo, como tú señalas; pero hay desde luego bastantes indicios que apuntan en esa dirección...
En fin, querido amigo, ya sabes que esta es siempre tu casa (como la de Anro, Clarice, Inma...).
Todo un placer y hasta muy pronto.

Anónimo dijo...

Hola Javier:

He leído una crítica bastante negativa de tu libro. Lo pongo en tu conocimiento:

http://www.miradas.net/2008/n77/libros.html

Sergio

JAVIER ORTEGA dijo...

Gracias, Sergio.
Afortunadamente, además de esta opinión (que no juzgo tan negativa, pues elogia determinados pasajes), me han llegado otras mucho más favorables.
En cualquier caso, para gustos los colores. Desde luego no es un libro que pretenda marcar un antes y un después en la historia de la literatura. Tan sólo aspira a, como admite la reseña que mencionas, "informar y situar" respecto de una figura capital que las últimas generaciones tienden a desconocer.
Desde luego no me parece de mal gusto reproducir el discurso final de "El gran dictador". Más bien creo que no sería de recibo haberlo omitido.
De nuevo gracias y un saludo.